La canción de la muerte del ángel negro
Mi canción favorita del primer disco de la Velvet es The Black Angel’s Death Song. Siempre me gustó. Tenía 15 años cuando la escuché por primera vez. La letra decía que estaban servidas todas las opciones del destino frente a uno y que no había nada que perder. Entiéndanme la revelación a la edad en que todo es revelación.
Lou Reed lo dijo mejor. Cantó:
The myriad choices of his fate
Set themselves out upon a plate
For him to choose
What had he to lose?
Lou Reed dijo también que eligió las palabras por la musicalidad, no por el significado. En el fondo todos hacemos lo mismo, Lou.
Es de las canciones noise de la Velvet ésas donde la viola de John Cale dronea. No tan noise como en el final de European Son después que suena el inodoro, ni tan canción como en Venus in Furs. Si están diciendo que las canciones que canta Nico son mejores, los atajo acá en este segundo párrafo. Nico fue una genia, sí. Las canciones que canta en el primer disco de la Velvet son hermosas pero todo eso lo hizo mucho mejor, alcanzando su éxtasis de melancolía gozosa, en sus versiones solista de las canciones de Jackson Browne- un tipo que usaba camisas de Outlet de locales pintados de negro y el pelo de un profesor de Lengua de secundaria- (The Fairest of the Seasons y These Days). Tema resuelto. Alguna cosa más? Ah, sí, por qué escribo “la velvet” y no “Velvet” o -Dios no lo permita- “Los Velvet”. Porque la Velvet es una banda femenina. Si tengo que nombrar una banda que represente lo femenino, diría la Velvet. Más que Viudas e Hijas (ja) o las Bangles (ja,ja). Fue la banda que compuso con la lógica del placer oceánico y no el rocanrol del centímetro. Basta comparar los “solos” de viola con los solos de “viola” de cualquier banda del momento. Otra cosa femenina de la Velvet es que a la hora de escribir una canción sobre la heroína, le puso Heroin, no Brown Sugar. Y encima, el bombo de la batería simulaba los latidos del corazón en el pico y en la abstinencia. Esos detalles hacen su grandeza.
Tiene mil canciones geniales la Velvet, por qué elegir The Black Angel’s Death Song? Además de lo dicho de la letra, la música arma un clima conciso y nocturno de vacío tanático y eso es un buen argumento.
Me entero al escribir esto que Beck hizo un cover de la canción, lo que da un hermoso continuum a este newsletter. La puse de fondo y es una versión muy linda que podría haber estado en One foot on the Grave. La entrada de wikipedia dice algunas boludeces pero también que Morrissey la eligió entre sus ocho canciones que se llevaría a isla desierta (a esta altura de su vida, Morrissey ya vive en una isla desierta). Me sorprendió. La llevaría junto a la reversión de (There's Gonna Be a) Showdown que hicieron los NY Dolls y Come and Stay With Me de Marianne Faithfull (supongo que lo escucharía con su amiga Nancy Sinatra hablando mal de Lee Hazlewood).
La versión del disco de la banana dura 3:14. Si hay algún matemático entre ustedes, es el argumento definitivo.
Hay otra versión que me encanta. Es la que está en el pirata en vivo en Le Bataclan (1972), con Lou, Cale y Nico. Lou Reed toca una guitarra acústica. La anuncian como una canción del primer disco. El sonido de la acústica contra la viola agrega auroras a la noche. Lou la canta sin la urgencia del disco, más tranquilo, como quien cuenta una historia que pasó mucho tiempo atrás. Ya no hay peligro. Ya sacamos conclusiones, aprendimos. John Cale, en cambio, elige tocar tonos más graves que en la grabación original. Los peligros de ahora - dice con la viola- son diferentes pero igual peligrosos.
El lugar donde se registró ese recital, Le Bataclan, fue construido en 1864; es un edificio con forma de pagoda y es el mismo donde en 2015 mataron a 90 personas en el recital de Eagles of Death Metal, que no eran ni águilas ni hacían death metal.
Esas mismas paredes funcionaron como cabaret de lujo a comienzos del siglo 20 y dió el gentilicio a varias generaciones de bataclanas, un gran concepto que recorre varios tangos, como en Garufa (1927) donde le dicen a uno:
tenés más pretensiones
que bataclana
que hubiera hecho suceso con un gotán
Capaz se la cantó John Cale a Lou Reed antes de irse. Capaz no, casi seguro.